El exasambleísta de Sociedad Patriótica, Galo Lara, quien fue extraditado el viernes pasado desde Panamá para cumplir una pena de diez años, acusado de cómplice de un triple asesinato ocurrido en el 2011 en Quinsaloma, provincia de Los Ríos, no ha recibido visitas todavía.
Según una programación mensual de visitas que se publica en la página web del Ministerio de Justicia, sólo las personas que constan en la nómina pueden recibir la visita el día y la hora designada en la cárcel regional de Latacunga.
El abogado de Galo Lara, Juan Vizueta, criticó este sistema de visitas y señaló que teme por la vida de su defendido. Agregó que como su abogado podría ingresar antes que los familiares puedan verlo, pero que también debe cumplir con ciertos trámites para obtener el permiso de ingreso, los mismos que ya iniciaría en estos días. Al tiempo que quiere confirmar las condiciones de salud en las que llegó a la cárcel.
De acuerdo con los horarios de la cárcel de Cotopaxi, los abogados tienen acceso los martes y jueves. Entre tanto, para Vizueta, su defendido estaría en calidad de incomunicado, lo cual prohíbe la Constitución en el artículo 77, dijo.
Vizueta agregó que no se tomará ninguna acción inmediata ante la justicia ecuatoriana y que esperará el pronunciamiento de los organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ante las cuales se ha presentado la denuncia sobre la supuesta persecución política.
El hijo de Galo Lara escribió, el viernes pasado, defendió la inocencia de su padre, desde la cuenta de Twitter de @GaloLaraY. “Mi padre es inocente, es un perseguido político del gobierno de Correa, el tiempo demostrará su inocencia ojalá mi padre pueda ver la justicia”. (I)