El Centro Cívico “Eloy Alfaro” de Guayaquil es la sede del “Seminario Internacional de Integración y Convergencia en América del Sur”, de cara a la Cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que se lleva a cabo desde ayer en la ciudad.
El evento, que culmina hoy, antecede a la inauguración del edificio de la Unasur, que tiene lugar mañana en Quito. A la cita acudieron ponentes de los doce países que integran el organismo, entre ellos Ernesto Samper, secretario general, quien en su discurso planteó la visión estratégica del organismo.
“La única manera de embarcarse en un proceso de convergencia es que entendamos que todos somos iguales, pero los que tienen más tienen que compartir con los que tienen menos”, manifestó.
Además se refirió sobre la creación del bloque Sur-Sur, señalando que “Latinoamérica es ahora el continente de las oportunidades”, e invitó a los países miembros a “pensar en un nuevo bloque. El bloque Sur-Sur”. Explicó que una de las razones por la cual se debe realizar a la brevedad posible es porque “la globalización nos está desbaratando”. También mencionó el tema del pasaporte suramericano, que busca “garantizar la libre movilidad de los 400 millones de ciudadanos de la región, el derecho a estudiar, trabajar, homologación de títulos profesionales y a integrarse con su familia”.
El canciller ecuatoriano Ricardo Patiño, aseguró que la Unasur tiene una institucionalidad fuerte y consolidada frente al desarrollo regional. “Es fundamental contar con una infraestructura regional que permita conectividad. Tenemos que acelerar la nueva arquitectura financiera”, cuyo elemento clave es el Banco del Sur. “No solo debe arrancar de inmediato, sino que debe convocar a que se incorporen progresivamente los cinco países de Unasur que no son miembros”, manifestó.
Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente de Brasil, sostuvo que está convencido de que la crisis mundial no tuvo incidencia en la integración, e instó a que se concrete la creación de un tribunal regional alterno a las cortes de La Haya y de la OEA, y el proceso de paz en Colombia. (I)