Fernando Balda, acudió acompañado de Gilmar Gutiérrez, Carlos Solórzano y otros militantes de Sociedad Patriótica, al Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi para visitar a Galo Lara Yépez, quien se encuentra recluido desde el pasado miércoles para cumplir una condena de 10 años de prisión por un delito de supuesta complicidad en un triple asesinato ocurrido en el 2011, en Quinsaloma, provincia de Los Ríos.
Balda quien fue el único autorizado para ingresar a esa cárcel, denunció a través de su cuenta en la red social Twitter, que el exasambleísta habría recibido maltrato en Panamá.
“…sus DDHH fueron violados desde Panamá, GaloLaraY fue víctima de tratos crueles y tortura en suelo panameño. Doy fe, lo acabo de ver: los tobillos destrozados llenos de llagas provocadas por los grilletes de acero. Solo de ver lo que le hicieron a @GaloLaraY en Panamá causa dolor por tanta injusticia”.
En su visita a prisión, Balda señaló que Lara “se encuentra mal de salud, es costeño, tiene diabetes y es hipertenso, eso le provocó un desmayo que le causó una herida en la cabeza, pero fue trasladado al policlínico”.
Además afirmó que a pesar que el estado de salud del exlegislador se ha quebrantado, su ánimo se mantiene intacto.
“La fortaleza de @GaloLaraY se encuentra intacta. Su mayor dolor es no poder ver a su familia con más frecuencia y no poder servir a su país como siempre lo ha hecho desde la fiscalización”.
El pasado martes, los abogados de Lara presentaron una denuncia contra Panamá y Ecuador ante el Comité de la Tortura del Alto Comisionado de las Naciones Unidas, por el trato que habría recibido durante su extradición a Ecuador.
Por su parte, la ministra de Justicia, Ledy Zúñiga, informó esta semana que Lara sí había recibido visitas desde el pasado sábado y que un examen médico había corroborado que “no entró golpeado o torturado”. (I)