Optimismo y confianza hacia un futuro mejor es lo que ven 30 trabajadores (la mayoría son mujeres) de la bananera orgánica de la Corporación San Miguel de Brasil, ubicada en el recinto Palenque, del cantón Pasaje (El Oro), con el proyecto ‘Uso de las fibras del raquis del banano en la fabricación de hormigón’.
Dicha iniciativa consiste en exprimir, por ahora en un rodillo artesanal, el tallo de esta fruta para sacarle, por lo menos, el 70% de humedad, mientras el 30% restante se lo hará al ser tendido en los cordeles de caña, en donde estarán entre 2 y 6 días, dependiendo de si hay un buen sol.
La idea de este proceso, mencionó David Espinoza, líder del proyecto, es que el raquis esté completamente seco, para luego extraer la fibra, que se usará en construcciones civiles, reemplazando las sintéticas, para evitar la retracción del hormigón.
Emilio Cedeño, miembro de la asociación de emprendedores, indicó que al principio esta iniciativa productiva les resultó un poco complicada, pero ahora ya se les hace fácil, “porque ya le cogieron el tino”.
“Esto es un trabajo que a futuro nos ayudará mucho en nuestra economía. Confiamos en que el proyecto se concrete lo más pronto para aprovechar al máximo el raquis o tallo de la fruta del banano”.
Aquello comparte Gabriela Chóez, trabajadora de la finca y parte del emprendimiento, quien, respecto a esta labor, dijo: “Me parece bien, es algo nuevo que estamos aprendiendo y que seguro en poco tiempo nos ayudará en nuestras finanzas”.
Por ahora, los 30 trabajadores de la bananera, que son parte de esta labor adicional, no reciben ninguna remuneración por el proceso de triturar el raquis de banano. “Hoy en día lo hacemos por voluntad, sin interferir en nuestras labores de la bananera”, añadió Cedeño.
Espinoza explicó que si las fibras que se obtienen del raquis del banano son utilizadas en hormigón de nivelación, no provocarán fisuras, lo cual evita costosas reparaciones y baja costos adicionales en obra.
En el aspecto socioeconómico, agregó, esta idea significaría crear nuevos puestos de empleo en zonas rurales, donde se produce la materia prima dando paso a la industrialización no contaminante de las fibras del raquis.
(I)