México.
Decenas de miles de mexicanos indignados por la desaparición y posible masacre de 43 estudiantes protestaron este jueves en Ciudad de México y otras regiones del país contra el presidente Enrique Peña Nieto, en la peor crisis de su mandato.
“Fuera, Peña Nieto”, “Urgente, que renuncie el presidente”, “Ya me cansé de un gobierno podrido”, fueron las consignas que gritaban los manifestantes que partieron de tres estratégicos puntos de la capital hacia la emblemática plaza del Zócalo, frente al Palacio Nacional, resguardado por vallas metálicas y cientos de policías.
Los padres de los estudiantes llegaron en tres caravanas que recorrieron el país clamando porque sus hijos aparezcan vivos, y encabezan la marcha. “No están solos”, exclamaban los manifestantes.
Las protestas reclaman justicia y condenan la desaparición de 43 estudiantes de la escuela de maestros de Ayotzinapa, en el sureño estado de Guerrero, el 26 de septiembre en Iguala -misma región-, tras ser atacados por policías corruptos y narcos bajo órdenes del alcalde local vinculado al cártel Guerreros Unidos.
Más temprano, encapuchados, armados con palos y tubos, se enfrentaron con bombas molotov y petardos a las fuerzas antimotines tras bloquear con llantas incendiadas una vía cerca del aeropuerto de la capital, con saldo de al menos 15 detenidos, varios policías lesionados y patrullas dañadas.
Presionado por el caso de los estudiantes y el escándalo por una lujosa mansión de su esposa, Peña Nieto advirtió que actuará con firmeza ante brotes de violencia.
Para los analistas, México vive una de las peores crisis en décadas.
Los mexicanos han alzado la voz por el caso de los estudiantes, pero también para expresar su hartazgo por la corrupción, la penetración del narcotráfico en las instituciones -crudamente desnudada con Iguala- y la violencia. (I)