Ayer, durante la ceremonia de graduación de 2.322 docentes del magisterio fiscal, que obtuvieron maestrías internacionales, el presidente de la República Rafael Correa, no perdió la oportunidad para profundizar en sus críticas al destituido alto mando militar, a quienes les recordó que su compromiso es con la Patria y no con una entidad, como el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa).
El Primer Mandatario agregó que era “poco conveniente para la democracia” que existan “representantes armados” de las Fuerzas Armadas; esto en referencia al tema de “los 41 millones de dólares pagados en exceso al Issfa”, por un presunto sobre avalúo en la venta de 66 hectáreas de lotes de terrenos al Ministerio del Ambiente, situación que generó malestar en dicha institución.
“… Si actúan como dirigentes gremiales, es grave. Los maestros pueden tener su organización y sus representantes gremiales (…) pero ¿quién de ustedes tiene representantes armados?, eso es totalmente ilegítimo, inoportuno, inconveniente en una democracia”, enfatizó.
Correa calificó como “absurdo” que los militares retirados pidan un pronunciamiento judicial, pues hablan “leguleyadas”.
“La controversia suscitada con el Issfa, no es de valores monetarios, es de valores morales. Basta de diferencias hirientes en donde unos pocos pretenden tener su propio sistema educativo, empresarial, de comisariatos, de educación superior, de seguridad social, asegurarse todo y el resto vea qué hace. Soldado de la Patria a reaccionar, aún existe esa corriente que cree que las Fuerzas Armadas son una estructura paralela al Estado, no señores, las Fuerzas Armadas son parte de los servidores públicos del Estado”, expresó el jefe de Estado ecuatoriano.
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